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viernes, 27 de abril de 2012

Celebración del 1º de Mayo en Villarrobledo 2012

El próximo 1º de MAYO, tras muchísimos años, volverá a conmemorarse en Villarrobledo el día más relevante para la lucha de los trabajadores.
Para ello, la Plataforma en defensa de lo Público del área de Villarrobledo (participan en ella también personas de varias localidades cercanas) ha convocado una MANIFESTACIÓN que partirá a las 12.00 horas de la Plaza Vieja (donde está el Ayuntamiento) hasta Los Jardinillos (junto a la Plaza de la Constitución).

Se está invitando también a los participantes a que, al término de la Manifestación, comamos un bocadillo,... (cada grupo de personas o colectivo se organizará para ello) allí, en Los Jardinillos, de manera colectiva y con el lema: COMPARTIR PARA SOBREVIVIR. Eso nos permitirá afianzar los lazos que estos meses de luchas hemos ido forjando. Asistirán compañer@s de varias localidades, no sólo de Villarrobledo. Y la Plataforma, dentro de sus posibilidades, preparará zurra y aportará algunas viandas.

Es fundamental que todas y todos nos impliquemos en esta Movilización. La llamada fiesta del trabajo sigue siendo el día en que la inmensa mayoría reclama, desde hace más de un siglo, que tiene derecho a una vida digna. Hoy, cuando todos los derechos conquistados con tanto esfuerzo están siendo eliminados por los capitalistas y sus gobiernos esbirros, es más necesario que nunca unirnos en esa fecha y dejar claro que, junt@s, no permitiremos que se salgan con la suya.



¡¡¡VIVA EL PRIMERO DE MAYO!!!
¡¡¡CONTRA LA CRISIS, LA LUCHA ES EL ÚNICO CAMINO!!!
¡¡¡LA CRISIS QUE LA PAGUEN LOS CAPITALISTAS!!!

Plataforma Anti-cementerio Nuclear en Villar de Cañas


¿Cómo y cuánto puede afectar el transporte de residuos radiactivos a Villarrobledo?


Por razones de coste y seguridad, todo el material radiactivo que pueda ser transportado en tren, vendrá por esta vía. Es muy probable que el combustible gastado procedente de las centrales nucleares que cuentan con terminal de ferrocarril propia o muy próxima, como son Ascó y Vandellós, llegue por la vía Albacete-Alcázar, pues a pesar de ser más larga, resulta menos tortuosa que la vía Valencia-Cuenca-Tarancón. De hecho, en la memoria presentada por el Ayuntamiento de Villar de Cañas se propone la estación de Záncara como punto posible de carga y descarga para los residuos nucleares[1].


Si se sigue el protocolo empleado en Francia y Alemania, no se llevará a cabo más de un transporte radiactivo por ferrocarril al mes. Cada tren suele transportar tres contenedores en vagones independientes, separados entre sí por un vagón vacío. Después, se requerirán tres camiones que irán con la señal del trébol radiactivo para llevar cada uno un contenedor[2].


Se calcula que alrededor de 2.000 toneladas de residuos altamente radiactivos podrían ser transportadas por ferrocarril a través de la vía Albacete-Alcázar, y descargadas en la estación de Záncara. Cada contenedor portará 4 elementos combustibles, es decir, 1.300 kg. de residuos radiactivos, lo cual significa que podrían pasar por Villarrobledo hasta 1.500 contenedores.


Según Pablo Zuloaga, responsable de ingeniería de ENRESA, se acepta que la radiación recibida a unos cien metros del contenedor de residuos radiactivos es próxima a 0,1 mSv (milisievert) cada hora y que con doce horas en la proximidad del contenedor se alcanzarían las dosis máximas permitidas de radiación para un año. El tiempo que tardaría un tren de mercancías en bordear Villarrobledo a 40 km/h se ha estimado en 4,5 minutos[3], por lo que el mero tránsito de un convoy de residuos radiactivos someterá a los vecinos más próximos a la vía a dosis de 0.026 mSv, el equivalente a 6 radiografías intraorales ó 2 radiografías panorámicas (completas de maxilar y mandíbula).


Si damos por válido el protocolo franco-alemán -un convoy radiactivo por mes-, los habitantes de Villarrobledo pueden llegar a acumular una dosis anual próxima a 0,27 mSv, correspondiente a 21 radiografías panorámicas y casi 70 radiografías intraorales, sin beneficio diagnóstico alguno, sin información y sin consentimiento previo. Ningún paciente odontológico aceptaría someterse voluntariamente a semejante cantidad de radiación. Tales dosis afectarían también a embarazadas y niños, colectivo 10 veces más sensible a las radiaciones, a quienes no se recomienda irradiar por razones médicas si no es estrictamente necesario. Está demostrado que los exámenes radiológicos amujeres embarazadas, aun con dosis inferiores a 0,1 mSv, incrementan hasta el 50 % la probabilidad de leucemia aguda –cáncer de médula ósea- en sus hijos expuestos, estando el riesgo directamente relacionado con el número de exámenes realizados.[4]






Teniendo en cuenta los años de funcionamiento previstos para las centrales de Vandellós II y Ascó (I y II), y confiando en que los políticos no les concedan temerarias prórrogas, se calcula que podrían transitar por esta vía, como ya se mencionó, unas 2.000 toneladas de residuos radiactivos, -1.500 contenedores-, lo cual provocará que la población reciba una dosis total acumulada de 11,25 mSv, equivalente a 10 tomografías mandibulares, 900 radiografías panorámicas o 3.000 radiografías intraorales… insistimos, sin beneficio diagnóstico alguno, sin información previa y sin consentimiento.


Todo ello suponiendo que no tenga lugar ninguna parada no prevista por avería, sabotaje o accidente. Una grieta de menos de un milímetro en un contenedor tendría efectos trágicos. Si bien los contenedores resistirían el impacto contra una superficie plana desde bastante altura, las pruebas de resistencia resultan claramente deficientes y fácilmente superables. No se tiene en cuenta un incendio de más de 30 minutos de duración, ni el impacto a más de 40 km/h contra un objeto punzante, una viga o forma de hierro de otro tren. Tampoco se tiene en consideración el posible impacto contra contenedores de sustancias corrosivas y/o inflamables.


Los fríos cálculos de muertes provocadas por esta radiación en la población general próxima a la ruta de transporte son de un rango de 10-6, es decir, de algunas muertes por cada millón de expuestos. La mortalidad causada por la dosis de irradiación que ENRESA se compromete a no exceder se estima en 0,5 por millón/año, lo cual implica que el transporte de los residuos desde las centrales nucleares hasta Villar de Cañas va a ser el responsable directo de la muerte por cáncer de entre 30 y 300 personas en 20 años. Son pocos si se compara con los fallecidos por causa del tabaquismo, responsable del 30 % de los cánceres, pero conviene dejar claro que fumar hoy es una decisión personal, no una imposición[5].


Estos cientos de muertos serían inadmisibles si correspondieran a acciones terroristas. De hecho, cifras menores de víctimas han condicionado –acertadamente- toda la política interior y exterior no sólo de España, sino de muchos otros países de cultura occidental, destinándose miles de millones de euros/dólares a prevenirlas.


Job Moya Peraira










[1]http://www.emplazamientoatc.es/Candidatos/Proyectos/Villar%20de%20Ca%C3%B1as/AnexoII_Terrenos_Villar.pdf






[2] http://www.larazon.es/noticia/5982-trasladar-con-seguridad-7-000-toneladas-de-residuos-nucleares






[3] Velocidad establecida para el transporte de residuos altamente radiactivos.






[4] Cardis E, Carpenter L, Gilbert E, Howe G, Woodward A, eds. Human Cancer Risk due to low-level Ionizing Radiation. Lyon: International Agency for Research on Cancer. JARC Sci Publ No 133,1995.






[5] Guijarro Ponce, José Andrés. Artículo de Opinión. Médico ginecólogo y obstetra del Hospital Virgen de la Luz (Cuenca).